miércoles, 31 de octubre de 2007

Homenaje a "los Liantes" 3/3


Se dice que las películas de Esteso y Pajares son machistas porque tratan a las mujeres como trozos de carne. Podríamos rebatir este argumento diciendo que si ello fuera así, el papel de la esposa de Fidel no tendría por qué ser el de la mujer cabal e inteligente que se da cuenta de que la vida de su marido no es la más correcta. Pero no lo haremos porque nadie nos creería y las causas perdidas no son lo nuestro. Es más, añadiremos unas cuantas referencias que en las películas se hace al sexo femenino y que hace más que obvio que no intentemos luchar contra la corriente:

- La mujer es eso que lleva bragas.
- Una mujer que piensa siempre es un peligro.
- Una mujer que no habla, ¿no es acaso un caso de suerte?

Son sólo tres ejemplos del tratamiento de los diálogos con los que podemos disfrutar mientras vemos esta peli. Destacamos otros aquí, como la sesuda estrategia de Amador para intentar llevarse al huerto a una rubia en el casino:

Amador: Hola, ¿a qué juegas?
Ella: A la ruleta americana.
Amador: ¿Jugamos a papás y a mamás?

Y en ese plan. También hay lugar para la filosofía, como cuando Fidel, al pillar a su mujer y a su amante en la caravana de Amador, suelta un:

- El que se oculta, algo tiene que ocultar.

Eso lo dicen en una de Bergman y los críticos más intelectuales estarían analizando las influencias que Poe y La Carta Escondida poseen en su obra. Pero claro, como lo han dicho esos de los pantalones cortos y la sueca en bolas, pues no cuenta.

A nuestro modesto entender, esa escena de la caravana es uno de los puntos cumbre del cine patrio, pues mezcla perfectamente el pensamiento metafísico del que hablábamos con dosis de destape y humor, sin duda para hacerlo más accesible a las aún por entonces tiernas mentes de la sociedad española. Eso sí, humor de calidad, jugando con las palabras y con su doble sentido, como cuando, al encontrar Fidel un bolso igual al de su esposa en la caravana, antes de descubrir el pastel, saca un pañuelo y, atando cabos, expresa:

- ¡A mí este pañuelo me suena!

Pañuelo, suena, ¿lo pillan? Pues así todo el rato, oiga. Es que son para morirse.

Sí, lo reconocemos, ahora es muy fácil criticarles, a toro pasado, como los cobardes, pero no por ello hemos de dejar de reconocer que estos señores han sido innovadores y que han marcado escuela. Y no lo decimos sólo por sus interpretaciones. Hablamos ahora de marketing. Concretamente, de product placement. Si es usted profano en la materia, piense en una de las teleseries que ocupan ahora nuestras pantallas televisivas. Seguro que se le ha hecho raro que en plena discusión en cualquier habitación de la casa, pongamos por ejemplo, el WC, aparezca, en el lugar más insospechado, junto al papel higiénico, un brick de PULEVA. ¿Qué pinta ahí? Muy fácil: está haciendo publicidad encubierta. Ingenioso truco, ¿verdad? Pues eso lo inventó Ozores en esta peli. Cuando Amador se beneficia a la primera de la peli con Fidel metido en la nevera porque no encuentran las llaves de las esposas que los unen (mítica solución, sí señor),un brick de CLESA nos impide ver las pudendas partes de abajo de la moza, llevando nuestra atención a la marca en cuestión. Y no es la única marca que aparece, porque seguro que Codorniz también pagó por que su póster apareciera en plena discusión matrimonial de Fidel. Por no hablar de lo que se dejaría la discoteca JOY, muy de moda por aquel entonces, y que aparece por doquier, en cualquier pared, creando una imagen de marca muy atractiva y de una manera ciertamente inusual en la época.

En resumen, encontramos en esta película la tradición literaria proveniente de la picaresca española, el glamour de las películas de casinos y grandes apuestas, el despertar al erotismo en un país sediento de carne, la crítica social encubierta de quien no se atreve todavía a alzar la voz por miedo de que sigan cayendo ostias, la filosofía, el humor, la acción desenfrenada, innovaciones marketinianas… ¿qué más se puede pedir?

Que la saquen en DVD, por favor. Y que les hagan una estatua, que ya va siendo hora. Ah, y que le pinten una raya al Esteso, que ya le ha dado el telele. ¿O estará fingiendo y esa espuma que suelta por la boca también es falsa? Ay, qué liantes son estos liantes.

(final)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto mejora, señores!! Lágrimas de emoción surcarían mis mejillas, pero me contengo porque hay gente alrededor

El superintendente Vicente y el Capitán RMK dijo...

Debemos decir, en honor a la verdad, que estas tres entradas sobre Los Liantes es un homenaje a nuestro viejo amigo Máximo Ángel, y a la persona que pidió suecas en bañador.

¡Viva Fernando Esteso!